domingo, 11 de noviembre de 2012

De historias que importan



"Cuando conocí a Lilu ya tenía aproximadamente un año y medio de edad. La habían recogido de la calle apenas un mes antes, así que no sabía nada de su vida anterior. No conocía a sus padres, no sabía si alguna vez había tenido familia, si había vivido siempre en la calle, y lo peor, no tenía fotos de cuando era la cachorrita más bonita del mundo… Así que le preguntaba, y ella me decía que me lo contaría después de comer, o después de dar un paseo, o mañana, y los días pasaban y nunca me contaba nada.

Pero hace poco estuve muy triste, y ella se acercó y me lamió la cara, incluso me trajo sus juguetes (así de buena es). Pero yo no me animaba con nada, así que Lilu decidió contarme su historia de antes, de cuando no nos conocíamos y ella estaba sola, para que viese que nunca se debe perder la esperanza.

Y la verdad es que es una historia genial, con aventuras, partes que dan un poco de miedo, personas malas, personas buenas, patos y un final feliz. Me quitó toda la tristeza de una vez y me enseñó que nunca debemos rendirnos.

Pero a veces se me olvida, y sé que a muchas otras personas les pasa lo mismo. Así que le he pedido permiso para escribirlo todo, y que Manoli lo ilustre para que se entienda mejor, y me ha dicho que sí. En ello estamos, os vamos contando ¿no?"

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Así arranca una nueva aventura, compartida con alguien muy especial en mi vida, y contando una historia igual o más especial. Lilu asoma la patita con muchísima ilusión, moviendo la cola de un lado a otro, esperando por fin, no estar sola.
Si queréis acompañarla, podéis hacer click justo aquí: http://lilunoquiereestarsola.tumblr.com/
¡Empezamos!

4 comentarios:

  1. Que bonito! Muchos ánimos con la nueva compañía y seguro aventuras!

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  2. Es la historia más tristealegre que he oido jamás.Muchos ánimos a ti y a esa perrilla tan maja, y enhorabuena a ambas por haberos encontrado ;)

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Buenos días. y por si no volvemos a vernos: buenos días, buenas tardes y buenas noches.